«… llamadas a trabajas por el Reino de Dios en los corazones, a través de nuestra oración, adoración y ofrenda ante Jesús Hostia».
El 31 de mayo de 1949, festividad de María Reina, la hermana Mª del Amor Misericordioso (nuestra cofundadora), viste el santo hábito de la institución por primera vez. Un hábito que amamos como nuestra mejor gala.
Primero podemos definir que es el hábito para una religiosa. Siempre es más que la suma de sus partes, que un diseño bonito o austero. Tiene un significado más grande, espiritual. Es el traje de novia con que esperamos Cordero, sin mancha, sin arrugas…
Al usar el santo hábito decimos: Somos de Cristo, de Él y de nadie más. Reservamos lo mejor para Él. En nuestro caso además, sus colores reflejan la realidad espiritual que queremos vivir. Os lo describimos.
El rojo representa la hoguera que arde sin consumirse: amor, fuego, pureza y santidad.
María de Dios, Nuestra Madre Fundadora, lo define así en sus escritos:
«los velos blancos, capa de coro blanca… blancos como la sotana Papal, símbolo de la hostia, en cuyo centro destaca…el rojo hábito que encubre la cruz…».
«Rojo vivo como su Corazón Divino, su Preciosísima Sangre, su caridad abrazadora…»
Aún se atreve Ntra. Madre a plasmarlo en un poema:
«Es símbolo de amor crucificado, el hábito que vistes este día,
es símbolo de fuego y alegría
y de mística unión con el Amado.
Tu corazón en llamas abrazado
transfórmase en Jesús-Eucaristía,
hostia con JESÚS-HOSTIA, con MARÍA».